CÓDIGO DE RED
La energía eléctrica es un recurso indispensable para todos, no importa si es para uso personal, comercial o industrial, absolutamente todos hacemos uso de ella. Debido a que todos los que estamos conectados a la red eléctrica nacional, estamos vinculados unos con otros, se estableció un nuevo reglamento de operación llamado código de red.
Probablemente te preguntes ¿Qué es el código de red? ¿Cuál es su objetivo? ¿Qué pasa si no lo implemento?
En PEF queremos ayudarte a cumplir con todas las normativas necesarias para que tu negocio, edificio o industria opere de manera correcta, por eso te dejamos toda la información que debes tener presente en cuento al código de red desde sus requerimientos particulares hasta las obligaciones que genera de una manera fácil.
Iniciemos por lo básico ¿Qué es el código de red?
Es el documento que establece el manual regulatorio de los requerimientos técnicos, administrativos y legales para la conexión o interconexión de los centros de carga al Sistema Electro-Energético Nacional (SEN).
En otras palabras, el código de red es el que determina los requisitos que los centros de carga deben de cumplir para poder conectarse al SEN de manera que se pueda garantizar la estandarización y normalización del mismo en cuanto a eficiencia, calidad, confiabilidad, continuidad, seguridad y sustentabilidad.
Además, abarca todos los procesos de planeación, medición, control operativo, control físico, acceso y uso de la infraestructura eléctrica, procesos de los cuales nuestros servicios pueden ayudarte dependiendo del tipo de proyecto que tengas.
Su principal objetivo es incentivar el desarrollo, operación, mantenimiento, modernización y ampliación del SEN de una manera coordinada, económica y sobre todo eficiente.
¿El código de red es obligatorio?
El código de red es una disposición emitida por la Comisión Reguladora de Energía (CRE) derivada del decreto de reforma energética conforme al artículo 12 fracción XXXVII de la Ley de la Industria Eléctrica (LIE). Fue publicada en el Diario Oficial de la Federación (DOF) el 8 de abril de 2016 y entró en vigor al día siguiente de su publicación, así que si, si es obligatoria.
¿Quiénes deben cumplirlo?
Si bien desde su entrada en vigor el código de red es obligatoria, no aplica para todos. Se enfoca en todas las empresas que tengan un consumo de energía eléctrica mayor a 1 MW (Megavatio) y/o que estén conectados en un voltaje mayor a 69 KV (kilovatio).
En ese sentido todos los usuarios del Sistema Eléctrico Nacional como el Centro Nacional de Control de Energía (CENACE), los transportistas, distribuidores, generadores, comercializadores, suministradores, centrales eléctricas y centros de carga deben de cumplirla en todo su rigor.
El código de red solicita mantener el factor de potencia entre 0.95 en atraso y 1.0 con medición cinco-minutal. ION9000 es el medidor clase A con capturas de forma onda de hasta 1024 muestras/ciclo que mide óptimamente la variable de potencia.
Requerimientos
Los parámetros que son considerados dentro del código de red desde el enfoque de conexión van de acuerdo a su clasificación y demanda. Lo primero que es necesario hacer son los estudios correspondientes para evaluar si se cumple o no con los límites establecidos al mismo tiempo que se proponen soluciones aplicables dependiendo de cada caso.
Probablemente te preguntes ¿Cuáles son los estudios que debo de hacer? Lo que debemos examinar es básicamente la calidad de la energía, el cortocircuito, la coordinación de protecciones y los flujos de carga.
Una vez dicho esto, existen requerimientos técnicos específicos para los centros de carga que determinan su alcance y aplicaciones.
Para todos los centros de carga de alta y media tensión que se encontraban conectados y operando en el SEN desde antes de la publicación del código de red en el DOF, el manual de conexión prevé un plazo que no podrá exceder de 3 años, a partir de la referida publicación, de manera que se pueda asegurar el cumplimiento del decreto, es decir, todos los centros de carga que en el 2016 se encontraban en el decreto anterior, tenía un plazo de 3 años para adaptarse al nuevo requerimiento.
Dicho plazo se venció el 9 de abril de 2019.
